Si has empezado a notar como tu hijo presenta una conducta peculiar u obsesiva, habla con un lenguaje formal y rebuscado, no entiende los límites de los espacios personales ni tampoco comprende las bromas o el sarcasmo, entonces comienza por sospechar la presencia de un síndrome de asperger.
El síndrome de asperger es una condición neurológica que forma parte de los trastornos del espectro autista (TEA). Su diferencia radica en que los niños con asperger no presentan un retraso mental ni dificultades a temprana edad con el lenguaje; sino todo lo contrario.
¿El síndrome de asperger se incluye dentro de los TEA?
El síndrome de asperger forma parte de la clasificación más alta de la afección del desarrollo llamada trastorno del espectro autista.
Esto se debe a que posee síntomas similares con relación a otros trastornos del neurodesarrollo, y por eso la importancia de hacer un diagnóstico diferencial certero.
Síntomas del síndrome de asperger
¿Cómo es una persona o niño con asperger? El asperger suele considerarse como un tipo de autismo de alto funcionamiento.
Eso quiere decir que esta afección perteneciente a los trastornos del espectro autista comparte ciertas limitaciones en la conducta y las habilidades sociales propias del TEA.
La diferencia radica en que los niños con asperger logran un desenvolvimiento notable en su capacidad cognitiva y en el uso del lenguaje.
¿Cómo es la comunicación de una persona con síndrome de asperger?
- Un niño con asperger va a presentar dificultades para entender la comunicación no verbal y, por lo tanto, se le dificultará la comprensión de la subcomunicación que se lleva a cabo por este canal.
- Es usual encontrar destrezas lingüísticas típicas, pero con un uso anormal del lenguaje.
- Habla con un lenguaje inusual, monótono, con palabras técnicas, incluso inventando palabras o expresiones.
- Los niños con asperger no entienden los diversos matices que se incluyen en una conversación: bromas, ironía, sarcasmo, metáforas. En realidad, suelen ser muy literales.
- Es fácil para ellos hablar sobre un tema de interés durante largo tiempo, pero les cuesta conversar sobre banalidades o temas superfluos.
¿Cómo es un niño con asperger en las relaciones sociales?
- Le cuesta comprender ciertas reglas sociales como el espacio personal, evitar temas delicados en momentos inoportunos y comportarse adecuadamente cuando es necesario.
- Aunque desea interactuar con otras personas, no sabe cómo hacerlo, por lo que muchas veces prefiere aislarse.
- Le cuesta comprender los sentimientos y emociones de las demás personas, por lo que da la impresión de ser un insensible calculador.
- Así como no entienden las emociones de los demás, también se le complica comprender la naturaleza de sus propias emociones.
¿Cómo piensa y se comporta un niño con asperger?
- Es completamente analítico, y su pensamiento, que es rígido e inflexible, le es útil para prestar atención a los detalles y a los patrones.
- Tiene una fuerte limitación para desarrollar el pensamiento flexible; por lo tanto, se le complica encontrar alternativas para solucionar un problema.
- Crea rutinas que sigue al pie de la letra. Por lo tanto, es fiel a sus hábitos y los ejecuta de forma sistemática.
- Los hábitos le proporcionan seguridad, de manera que cuando ocurre un cambio, por muy leve e insignificante que sea, pierde el control y se vuelve histérico.
- Los niños con asperger pueden ser hipersensibles a ciertos estímulos (luces, olores, ruidos, sabores, etc.), por lo que muchas veces tienden a reaccionar de forma desagradable o molesta.
- Muestran una obsesión poco normal por un tema que sea de su interés, lo que les permite acumular mucha información y hasta convertirse en expertos sobre algo en específico.
¿Cómo diagnosticar el síndrome de asperger?
Este trastorno del neurodesarrollo suele diagnosticarse entre los 4 y los 11 años de edad. El método más confiable para hacer un diagnóstico consiste en observar clínicamente al paciente para detectar signos evidentes de asperger.
El profesional capacitado tendrá que confirmar ciertos criterios para determinar la presencia del trastorno. Estos criterios están relacionados con el comportamiento, las interacciones sociales y la comunicación.
Eso quiere decir que, clínicamente, el niño debe presentar un patrón de comportamiento rígido y poco normal en conjunto con dificultades para la relaciones sociales. Sin embargo, no debe presentar problemas con su lenguaje y capacidad cognitiva.
De hecho, para diagnosticar el síndrome de asperger, un niño tiene que mostrar un desarrollo normal del lenguaje y también tener una inteligencia igual o superior a la media.
Comorbilidades
Es frecuente que exista una comorbilidad con otros trastornos del neurodesarrollo como el TDAH, los tics, los trastornos relacionados con el aprendizaje o el trastorno obsesivo-compulsivo.
Hay otra serie de trastornos del neurodesarrollo que, sin ser síndrome de Asperger, pueden aparecer conjuntamente. De hecho, se encuentran estos cuadros principalmente en el TOC, en donde las conductas obsesivas pueden interpretarse como signos de asperger.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento consiste en normalizar los mecanismos cerebrales de autocontrol y potenciar al máximo el desarrollo neurológico para conseguir solventar todas las dificultades. Si se asocian otros problemas, es importante tratarlos simultáneamente para hacer lo más efectivo posible el tratamiento.
Un plan de tratamiento eficaz debe incluir:
- Una terapia para fortalecer las habilidades sociales con el fin de mejorar las interacciones personales.
- Un tratamiento cognitivo conductual para flexibilizar el pensamiento y potenciar el autocontrol.
- Fármacos para tratar posibles trastornos asociados al SA, como el trastorno depresivo mayor o el trastorno de ansiedad.
- Una terapia física para mejorar la coordinación motriz.
- Terapia del lenguaje enfocada en los aspectos pragmáticos involucrados en la comunicación habitual.
Consulta a un especialista
La falta de información es quizás uno de los problemas más significativos para detectar el síndrome de asperger. Si el trastorno se detecta y maneja a tiempo, es posible lograr una mejoría en el tiempo de todas las áreas afectadas en el niño. Lo que va a significar un mayor rendimiento en los diferentes ámbitos de su vida.

¿Cuáles son los distintos grados de autismo que hay?

Grado 2 en Autismo
