A lo largo de los años, quizás hayamos escuchado alguna vez, acerca de la Psicología en este ámbito de estudio, que digamos, que, durante los últimos años, ha recibido un gran apoyo tanto por parte de los operadores especializados como, médicos, psicólogos, biólogos, como también de las personas de la tercera edad, que, en este caso, son las que más apoyo otorgan a esta modalidad de estudio, bien sea por distintos cambios sociales, o por el mismo envejecimiento progresivo. Debido a ello, podemos agregar, que, en la actualidad, el término Psicogerontología ha cobrado una relevancia significativa.
Podríamos decir que es una ocasión de encuentro, donde existe un taller en el cual podemos estudiar específicamente el fenómeno del envejecimiento, y a raíz de ello, es que hoy en día, existen distintos sistemas de evaluación mucho más modernos, tales como, modelos de interpretación y distintas estrategias para poder realizar intervenciones terapéuticas, es por eso, que en este artículo, hablaremos de todo lo relacionado con la Psicogerontología.
¿Qué se entiende por Psicogerontología?
Algo en lo que podemos coincidir todos, es que el envejecimiento, es catalogado como un fenómeno natural, ya que es una de las etapas pertenecientes al ciclo de la vida, y es que, a pesar de esto, este fenómeno ha tenido muchísimos cambios en el transcurso del tiempo, ya que, una persona anciana era catalogada como incapaz de hacer algo ya que no establecía un contacto social, y se encontraba en la mayoría de las ocasiones desconectado, sin embargo, en la actualidad, podríamos decir, que tienen un papel fundamental a nivel social, y sobre todo, a nivel familiar.
Aunado a ello, es que, en este cambio, podríamos decir que hace presencia la Psicogerontología, ya que es una disciplina actual, que se encarga de estudiar plenamente los efectos psicológicos relacionados con el envejecimiento, esta ciencia en específico, busca describir, explicar, comprender, y modificar todas las distintas actitudes que tiene el ser humano, una vez que va envejeciendo.
No obstante, para poder comprender mucho más a esta ciencia, es menester conocer la diferencia que existe con otras disciplinas, tales como la Geriatría y la Gerontología, las cuales podemos resumir en dos aspectos, a conocer:
Durante años, el envejecimiento era algo de lo que las personas no hablaban mucho, y es que, cuando una persona llega a esta etapa de la vida, ocurren distintos cambios que parecían inherentes al proceso de envejecimiento, y no se discutía mucho las formas en las que el individuo, lograba afrontar estos cambios, ya que, incluso el simple hecho de hablar de la edad en específico de las personas, no era algo muy común. Por consiguiente, debido a distintos avances que ha tenido el mundo en cuanto a la salud y la medicina, esta realidad ha podido ir cambiando, y ahora el ser humano, es capaz de llegar a edades bastante avanzadas teniendo un buen estado de salud, y es por eso, que la población de adultos mayores, ha ido creciendo cada vez más durante las últimas décadas, y es que, tal como se mencionó en un inicio, se espera que esto vaya aumentando en un futuro el estilo de vida, que sea sana y saludable y que las personas de la tercera edad no tengan ningún tipo de relación como las que se llevaban antes en las generaciones anteriores a las actuales, ya que, en el envejecimiento los cambios ya no se ve relacionado con perder la salud de una forma inevitable, todo ello, son hechos logrados por la ciencia y la evolución de la salud y medicina. Ahora bien, en este aspecto, es donde nace ese interés por la Psicogerontología, ya que todo radica con la finalidad de mejorar y promover la salud física y psicológica de los individuos de la tercera edad, ya que en esta etapa como ya lo mencionamos anteriormente, existen muchísimos cambios debido al envejecimiento, abordados de una forma muy directa para que ellos tengan una mejor calidad de vida. La Psicogerontología es un campo que busca trabajar, inicialmente, con las personas que tienen una edad avanzada, sin embargo, ayuda a facilitar todo ese proceso de evolución, cuando al mismo tiempo, es importante hacer énfasis también en que se debe adaptar el contexto en el que se encuentre el individuo, y que este pueda realizar sus actividades cotidianas, normalmente, las personas de avanzada edad a las que se les realiza una intervención a través de esta disciplina, se les ayuda a desenvolverse de una mejor manera en el ambiente, ya que el facilitador ayudará a que esta persona mayor, tenga a su disposición distintos recursos, que son fundamentales para poder afrontar de una mejor manera esta etapa de su vida. En primer lugar, como ya lo mencionamos previamente, este campo se enfoca, inicialmente, en las personas que tienen una edad avanzada, sin embargo, puede variar dependiendo del nivel de autonomía que tenga la persona, ya que esto puede ir relacionado con su salud física y mental. Sin embargo, debemos saber que existen dos tipos de envejecimientos, los cuales sería conveniente conocerlos, a continuación. En primer lugar, tenemos a este tipo de vejez, en donde los individuos que están pasando por este tipo de envejecimiento, los cambios que sufren son progresivos, ya que son los que le dan a cualquier persona que cumple esa edad, aunque tenga un cierto estado de salud óptima, en estos casos, podríamos decir que tienen niveles de funcionamiento psicológico físico y social bastante buenos para su edad. Aunado a ello, en este tipo de casos, el papel que cumple un psicogerontólogo, se va a ver orientado a lo que es la prevención, es decir, que ayuden a sobrellevar esta etapa a las personas que ingresan a la tercera edad, esto consiste básicamente, en promover que el envejecimiento sea activo, y se trate de ayudar a estas personas a que realicen ejercicios, y distintas tareas que puedan mantener tanto a su cuerpo, como a su mente de forma activa, y todo esto hará que sean mucho más independientes, y prevenga un deterioro físico y cognitivo de dichas personas de la tercera edad. En segundo lugar, tenemos la clase de vejez secundaria y terciaria, en esta modalidad, nos referimos al envejecimiento secundario o terciario, cuando son personas que tienen una edad bastante avanzada, pero que sus habilidades psicológicas y sociales se encuentren bastante deterioradas de tal manera, que no sean adecuadas, y, es por eso, que su autonomía se ve limitada, un ejemplo claro de esto, es el de las personas que, en una edad mayor, desarrollan Alzheimer. De igual manera, en estos casos, el objetivo principal del profesional de esta disciplina Psicogerontológica, se enfoca principalmente, en prevenir al individuo en función del nivel de deterioro que puede llegar a padecer la persona, a la cual se le esté tratando, todo esto, se realiza para que pueda tener un mayor bienestar, y también se le pautan una serie de tareas, que bien pueda realizar en su casa, ya que esto evitará que el deterioro físico y cognitivo que sufra el paciente, no sea mayor, y mejore un poco su calidad de vida. Podríamos decir, que, en la Psicogerontología, también es de suma importancia, que se trabaje con los cuidadores o familiares que están a cargo de la persona de la tercera edad, ya sea a nivel físico o mental, deben ayudarles a realizar ciertas actividades, ya que ellos, no podrán tener autonomía para hacerlos por sí mismos. Cabe destacar, que en el caso de los cuidadores de estas personas, es muy importante que tengan una formación continua con profesionales, es igualmente necesario, que dentro de esta formación, el cuidador pueda aprender, conocer y manejar distintas pautas de acompañamiento, que va a hacer que el proceso sea más fácil, para que la persona de la tercera edad, realice los ejercicios recomendados por el profesional, todo esto tiene la finalidad de que se promueva la autonomía de la persona, y que no exista un deterioro mayor en sus capacidades físicas y mentales. Igualmente, también es importante que se les dé una Psicoeducación, tanto a los cuidadores, como a los familiares, ya que a ellos, se les debe explicar de forma detallada la forma en la que se debe desarrollar lo que es un envejecimiento normativo y el envejecimiento patológico, también, a su vez, es importante que el familiar o persona que está a cargo sepa que, cuando se trate de un envejecimiento patológico, también se le debe explicar las distintas patologías que el individuo puede estar sufriendo, como pueden retrasar la evolución del mismo, debemos enseñarles distintas pautas, las cuales deben seguir para que puedan ayudar al paciente en su proceso. De igual modo, es importante también resaltar que, el que se les pueda brindar un apoyo psicológico a las personas con las que se realiza este proceso, tengan o no patologías, y sean personas de la tercera edad o no, será beneficioso para el proceso del paciente. Para concluir, debemos señalar, que, sin duda, este tema es bastante interesante, ya que muchas veces, olvidamos por completo el bienestar psicológico y los cuidados que debe tener una persona de la tercera edad, y siempre debemos tomar en cuenta sus necesidades y problemas, y que los mismos, sean tratados con un profesional del área, para que este le facilite las herramientas necesarias, para que así, los cambios de su envejecimiento, los puedan llevar de una mejor manera y que mejore su calidad de vida.
¿Cómo surge la Psicogerontología?
¿A quiénes ayuda la Psicogerontología?
Personas de la tercera edad
Envejecimiento primario
Envejecimiento secundario/terciario
Psicología Positiva
Habilidades Sociales
Autoestima Baja
Cuidadores/familiares
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Referencias Bibliográficas
Caprara, Mariagiovanna, and María Dolores López Bravo. Psicogerontología. 2014.
Fernández Lópiz, Enrique. “Psicogerontología para educadores.” (2004).
PEREZ SANCHEZ, L. U. C. I. A., et al. “Psicogerontología y trabajo anticipado del envejecer.” (2014).