Debido a ello, es indispensable comprender mejor a qué nos referimos con la palabra Asertividad, la cual es definida como un grupo de conductas que se manifiestan en un individuo, en un contexto interpersonal y busca principalmente, expresar cualquier tipo de actitud, deseos, sentimiento, opinión o derecho de ese individuo, pero de una forma directa, firme y honesta, ya que al mismo tiempo, busca respetar también los sentimientos, actitudes, deseos, opiniones y derechos que tienen el resto de los individuos.
Normalmente, los individuos que tienen una forma de comunicarse asertiva son completamente capaces de poder expresar los sentimientos que poseen, sus ideas y emociones, y esto lo hacen de una manera, en la que a pesar de que defienden sus derechos, respetan de una forma muy meticulosa los Derechos Asertivos del resto de las personas, ya que buscan adaptarse a cualquier contexto en el cual se produzca una comunicación, y también facilitan a que se haga posible ese proceso de resolución de problemas inmediatos y futuros, que, muchas veces, se relacionan con la comunicación.
Explorando los Derechos Asertivos Universales
Los derechos asertivos universales son aquellos que trascienden las barreras culturales y sociales, y se consideran inherentes a todos los individuos. Estos derechos permiten a las personas expresarse de manera honesta y respetuosa sin temor a represalias. Al comprender estos derechos, podemos mejorar nuestras interacciones y fomentar un entorno de comunicación más abierto y saludable.
¿Cuáles son las características de un Individuo Asertivo?
En este apartado, queremos hacer énfasis en las características que representa una persona asertiva, es por eso que debemos tener en claro y muy marcado, que la asertividad no se trata simplemente de un rasgo que poseen las personas, ya que, a pesar de que podamos referirnos a otros individuos como una persona asertiva, realmente es muy probable que ese individuo no lo sea, sino que se comporte de una forma asertiva o no asertiva en distintas situaciones.
Normalmente, la asertividad implica mucho más allá de lo expresado previamente, y explicaremos más detalladamente sus características para reconocer más fácilmente cuando una persona es asertiva o no. Dichas características son las siguientes:
- En primer lugar, debemos saber que es una característica que forma parte de la conducta, y no de las personas.
- En segundo lugar, tenemos que es una característica bastante específica de un individuo y a su situación, mas no es una característica universal.
- En tercer lugar, tenemos que se debe tomar en cuenta también el contexto cultural del individuo, de esta manera también en términos de otras variables que puedan existir.
- En cuarto lugar, tenemos que se basa principalmente, en esa capacidad que posee el individuo de escoger de forma libre su acción.
- En quinto lugar, y, por último, nos referimos a asertividad como una característica de la conducta socialmente efectiva, y que no busca dañar ningún otro individuo.
Grado 1 en Autismo
Grado 2 en Autismo
Grado 3 en autismo
Por otra parte, al tener en claro que la conducta puede ser asertiva o no asertiva, también debemos tener en cuenta los siguientes tres aspectos fundamentales, que son menesteres de considerar y son:
- En primer lugar, se debe tomar en cuenta el aspecto conductual, que es cómo se comporta el individuo, qué conductas lleva a cabo, entre otros patrones.
- En segundo lugar, tenemos también el aspecto personal, y es sobre quien en específico va dirigida la conducta, ya sea un amigo, conocido, pareja, figura de autoridad, extraños, entre otras figuras.
- En tercer lugar, y, por último, tenemos el aspecto situacional, que se refiere a qué lugar en específico se lleva a cabo la conducta, es decir, si se produce en un espacio público o privado.
¿En qué consisten los Derechos Asertivos?
Ahora bien, una vez que nos preguntamos con exactitud qué son los Derechos Asertivos, y, normalmente, esas situaciones en las cuales interactuamos con otras personas, nos obligan a encontrarnos en la tesitura de tener que tomar una decisión entre dos posibles formas de comportarnos, que puede que no sean deseadas para nosotros, ya que generan algún tipo de conflicto de intereses entre lo que es el comportamiento en sí que deseamos hacer, y lo que se considera como correcto en el momento.
Asimismo, podemos traer a colación como ejemplo claro de esto, y es que cuando nos piden algo que no tenemos deseo de hacer, es allí donde tenemos esa necesidad de negarnos e ir en contra de nuestros intereses, pero al mismo tiempo, el negarnos nos ocasionará un malestar, debido a que la otra persona puede sentirse rechazada o desentendida.
Cabe destacar, que estas situaciones, indudablemente, pueden ocasionar un conflicto entre el interés personal y lo que se considera como nuestros deberes, o esa forma correcta en la que un individuo debería comportarse, entonces existen momentos en los que podemos experimentar ciertos grados de ansiedad, o de culpabilidad debido a no hacer lo que consideramos que se debe hacer en estos casos.
Igualmente, también tenemos que existen otras ocasiones, en las que puede que otros nos comenten nuestros supuestos deberes en una forma de poder manipular el comportamiento que estamos teniendo, y, muchas veces, permitimos que esto suceda para poder sentirnos bien con nosotros mismos y con las otras personas, aunque eso nos lleve a actuar en contra de lo que realmente queremos.
¿Cuáles son los Derechos Asertivos?
Para desglosar estos Derechos, debemos considerar que se toman en cuenta diez Derechos Asertivos básicos, los cuales conoceremos, a continuación de la siguiente manera.
Sé tu Propio Juez
Cabe destacar, que es allí donde nos liberamos por completo de cualquier mandato que nos indique lo que se debe o no se debe hacer, ser nuestro propio juez implica también el que podamos expresar a los otros individuos todo lo que sentimos y pensamos de manera transparente, adicional a esto, también seremos capaz de poder afrontar cualquier cosa que no les guste.
Decidir si nos hacemos responsables de los problemas ajenos
Este segundo derecho en sí, implica el respetar nuestros intereses de la misma manera que respetamos el de las otras personas, y esto, normalmente, lo hacemos intentando buscar ciertas soluciones que conjuguen esta fórmula, y que siempre se pueda realizar de la mejor manera posible.
Es importante tomar en cuenta que existirán ciertas situaciones en las que ambas personas pueden entrar en conflicto, y estamos completamente autorizados, y tenemos el derecho de anteponer nuestras distintas necesidades ante las de las demás personas.
Dar o no explicaciones
En tercer lugar, debemos tener claro que si somos nuestro propio juez, y nuestro comportamiento siempre gira en torno a nuestros valores, pensamientos y opinión, es por eso, que no debemos pararnos a justificarnos ante los demás, intentar convencer a absolutamente nadie, es verdad que los otros individuos también tienen cierto derecho asertivo a expresar las distintas opiniones, hablarnos sobre lo que les gusta o no, pero la mejor fórmula es llegar a un posible acuerdo y mediar con la otra persona, sin embargo, en caso de que se manifieste completamente lo contrario, se deben respetar nuestras preferencias u optar por la de ellos, si es lo que queremos decidir.
Cambiar de Opinión
En cuarto lugar, tenemos el Derecho a Cambiar de Opinión, lo cual también es muy importante dentro de los Derechos Asertivos, y es que, cualquier situación que se nos presente la podemos observar de distintos puntos de vista, y es que la realidad de cada individuo puede estar en constante cambio, sin embargo, una persona asertiva está en su completo derecho a cambiar de opinión si así lo requiere.
Poder cometer errores
Éste quinto derecho, es uno de los Derechos Asertivos que tiene mucha más dificultad de manejar, ya que, en múltiples ocasiones, el individuo suele caer en la autoexigencia, es por ello, que el tener una actitud asertiva, también requiere el juzgarnos a nosotros mismos por cualquier tipo de error que lleguemos a cometer, y debemos asumir ese error, ya que somos seres humanos, y es algo completamente normal, debemos aprender responsablemente de ese error que cometimos, para que así se eviten repeticiones del mismo en un futuro.
Psicología Positiva
Habilidades Sociales
Autoestima Baja
Derecho a decir No Lo Sé
Este sexto derecho, nos habla acerca de lo imposible que es que sepamos absolutamente todo, y, es por eso, que este derecho en específico, nos habla de darnos esa oportunidad para preguntar con tranquilidad todas esas cosas en las que tengamos dudas, que podamos no tener en claro, o no comprendamos en su totalidad, debemos tener muy bien precisado que no estamos obligados bajo ninguna circunstancia a obtener las respuestas de absolutamente todo.
No necesitar la Aprobación del Otro
En séptimo lugar, tenemos que ante uno de los derechos que, aunque no lo parezca suele ser el más importante para que el individuo pueda conseguir su armonía y plenitud en la mayoría de sus relaciones personales, muchas veces, nos gusta el agradarle a los demás, sin embargo, es completamente imposible que le caigamos bien a todo el mundo, y, es por eso, que es bastante importante que de una forma asertiva aceptemos que existen individuos a los cuales no les agradaremos, así como a nosotros no nos podrá agradar todo el mundo, y digamos que, no debemos tener comportamientos con el único propósito de gustar al otro.
Debido a ello, es que sí que es importante que tengamos claro que debemos ser fieles a nosotros mismos, en cuanto a nuestros principios, e incluso valores, recordemos que nunca podremos ser completamente libres, si no somos capaces de arriesgarnos un poco y hacer aquello que realmente deseamos, incluso si esto puede ocasionar la antipatía de otros individuos.
Tomar Decisiones Ilógicas
Este octavo derecho, en numerosas oportunidades, este derecho se relaciona con uno de los principales Derechos Asertivos, que es el de ser nuestro propio juez, debemos tener en cuenta que somos completamente capaces de poder elegir nuestro objetivo, y tomar decisiones que, muchas veces, no tendrán lógica para las otras personas o para la mayoría, pero para nosotros, son totalmente lógicos, y se rigen por nuestros criterios y valores personales.
No Comprender Otras Expectativas
En noveno lugar, tenemos al derecho que nos muestra que, si somos individuos asertivos, no es para nada un indicador de que tenemos que adivinar mágicamente lo que otras personas puedan necesitar o esperen de nosotros, debemos tener muy en claro y entender que es difícil poder comprender las expectativas ajenas, y, en numerosas ocasiones, cuando nos enfocamos netamente en eso, podemos cometer un sinfín de errores.
No Ser Perfecto
Este décimo y último derecho, tenemos a aquel derecho que nos indica que podemos decidir No Ser Perfectos como persona, y es que, debemos intentar no buscar la perfección, recordemos que mejorar ciertos aspectos puede ser positivo, pero el querer progresar, muchas veces, no es el problema en sí, sino el deseo de alcanzar la perfección. Es importante que esa actitud asertiva esté presente en cada uno de nosotros, para que seamos capaces de juzgarnos y validar las metas que deseamos cumplir.
Para finalizar, debemos afirmar que, indudablemente, el ser un individuo asertivo, nos puede ayudar en múltiples ocasiones, a establecer relaciones completamente sanas, sin embargo, es importante apreciar que realmente nuestro comportamiento lo sea, y no que estemos hablando de lo que creemos que lo es, ya que, normalmente, entramos en ese trance de querer ser perfectos o creer que la asertividad va de la mano con la perfección.
No necesariamente esto debe ser así, existe siempre esa posibilidad de crecer y mejorar, o si nos sentimos agobiados por la falta de asertividad ante ciertas situaciones siempre está la posibilidad de dialogar con algún experto que te ayude a superar ese tipo de inconveniente, recordemos que la salud mental siempre es lo más importante.
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Referencias Bibliográficas
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